La crema pastelera es una crema dulce y suave, típicamente utilizada como relleno para pasteles, tartas y otros postres. En esta receta te cuento todos los trucos que nunca fallan para esta crema tan básica que mejora cualquier postre.
Su historia se remonta al siglo XVII en Francia, donde se le conocía como "crème pâtissière". Se cree que su invención se atribuye al famoso chef francés François Massialot, quien la incluyó en su libro de cocina "Cuisinier roial et bourgeois" publicado en 1691.
La crema pastelera se popularizó rápidamente en la repostería francesa y se convirtió en un ingrediente común en la elaboración de pasteles y postres. En Italia, la crema pastelera es conocida como "crema pasticcera" y también es un ingrediente común en la pastelería italiana.
A lo largo de los años, ha evolucionado y se ha adaptado a diferentes culturas y cocinas. Hoy en día, se pueden encontrar variaciones de la receta básica en todo el mundo, como la crema de coco en América Latina y la crema de cebada en Escocia.
Como vemos, esta crema tiene una larga y rica historia en la gastronomía mundial, y sigue siendo un ingrediente esencial en la elaboración de pasteles y postres en todo el mundo.
Aquí te dejo algunos trucos que pueden ayudarte a preparar una crema perfecta:
Siguiendo estos trucos, tendrás una deliciosa crema pastelera perfecta para cualquier postre.
Os explico cómo hacer crema pastelera con receta paso a paso para que no tengáis problemas en la elaboración. El éxito está garantizado.
Si tienes alguna duda, puedes preguntar lo que necesites dejando un comentario al final de la receta. También puedes contactar conmigo a través de Instagram, en mi perfil Zafranelas publico cada día cosas nuevas.
Una vez que las hayamos separado y puesto en el recipiente, le añadiremos el azúcar. Lo batiremos con ayuda de las varillas para que se integren bien todos los ingredientes. Bate hasta que la mezcla empiece a blanquear, verás que el color amarillo intenso se vuelve más claro.
Añadiremos la leche templada a las yemas batidas con el azucar y mezclaremos bien. Deberemos remover enérgicamente con la varilla para que se integren bien las yemas en la leche. Una vez que esté todo bien mezclado lo devolveremos a la olla y lo mantendremos a fuego muy suave.