Los espaguetis con almejas son una receta mediterránea muy fácil de preparar. Aunque existen muchas variedades diferentes de este plato, dependiendo de la zona italiana donde se elabore, su esencia es siempre la misma. Esta esencia es el uso de una pasta larga y el marisco como ingrediente principal . Pon Italia en tu mesa de una forma sencilla y con resultado 100% recomendable.
No siempre es necesario complicarnos en la cocina para disfrutar de una comida completa, nutritiva y satisfactoria. A veces, los ingredientes más simples pueden transformarse en un plato delicioso con un poco de creatividad y buen gusto. Un ejemplo perfecto de esto son las almejas frescas, que con su sabor marino y su textura, pueden convertir una sencilla pasta en un plato de diez.
Con ingredientes frescos y de calidad, y un poco de ganas podemos crear platos que nos hagan sentir bien. Gracias a esta receta, me reafirmo en el concepto menos es más.
Recurrir a lo básico cuando no tienes muchas opciones siempre es la mejor solución, y no solo en la elección de una receta. En cualquier aspecto de tu día a día, recurrir al origen de todo te amplia el horizonte en busca de soluciones.
Os explico como hacer espaguetis con almejas y su receta paso a paso para que no tengáis problemas en la elaboración. El éxito está garantizado.
Guarda esta receta en la pantalla de inicio de tu móvil para un acceso rápido. En la sección de ingredientes, selecciona los que necesitas para simplificar la compra. Además, ajusta el número de porciones deseadas y las cantidades de los ingredientes se calcularán automáticamente.
Comenzaremos cociendo los espaguetis en abundante agua con sal según las indicaciones del fabricante. Mientras tanto vamos a preparar el resto de la receta.
Ya os hemos comentado algunas veces que nos gusta preparar la pasta y su guarnición a la misma vez, de modo que ambas finalicen a la par y poder mezclaras inmediatamente. De esta forma evitamos que la pasta se reseque una vez cocida. Además podemos utilizar el agua de cocción para ligar la salsa del plato.
Según esto, refreiremos los ajos muy picados en una olla con aceite de oliva y la guindilla. Cuando comience a soltar sabor y los ajitos vayan saltando en la olla, le añadiremos las almejas. No hay mucho más que añadir, solo un poquito de agua para que las almejas se abran sin problemas y se forme una buena salsita. En principio no te recomiendo añadir sal ya que las almejas aportan mucho sabor marino al plato. No olvides que ajo, aceite y almejas son suficientes para crear una salsa perfecta. Sin olvidar el punto picante de la guindilla.
Taparemos la olla y dejaremos que se abran las almejas. Una vez abiertas habrán soltado todo su sabor y podemos seguir con la elaboración del plato.