¿Sabías que con este plato te solucionas la comida del día? Estos tallarines orientales son un plato asiático infalible con un equilibrio perfecto de carbohidratos, proteínas y vitaminas que lo hacen muy saludable.
Como os decía, un plato de pasta siempre soluciona una comida porque se hace de una forma muy rápida y le puedes añadir los ingredientes que tengas en ese momento en la nevera. La improvisación es una gran aliado en este tipo de platos.
Por todo lo anterior te dejo aquí una relación de los mejores platos de pasta que he cocinado en algún momento y que me han salvado en más de una ocasión.
Os explico cómo hacer tallarines orientales con la receta paso a paso para que no tengáis problemas en la elaboración. El éxito está garantizado.
La cocina oriental elabora recetas con tallarines desde hace más de 4 000 años. Los primeros restos de esta pasta fueron encontrados en China, por lo que se corrobora que este gigante asiático ancentral fue el primero en consumir este tipo de platos.
Existen distintos tipos de fideos chinos y que cada uno de ellos- son ideales para cada. ¿sabemos diferenciarlos a simple vista?
Los fideos orientales más conocidos en Europa son los fideos de huevo, también son los más destacados dentro de la cocina asiática y se elaboran con una base de huevo y trigo. Normalmente se presentan en sopas o platos de wok salteados con verduras y carne, aun así, es habitual verlos en platos fríos como ensaladas.
Por otro lado tenemos los fideos Udon. Son un tipo de fideos más grueso que encontrarás en platos típicos de la cocina oriental, están hechos con harina de trigo, agua y sal. Suelen comercializarse hidratados y envasados al vacío.
Añadimos los fideos de arroz, los cuales son ideales para las personas intolerantes al gluten ya que se elaboran con harina de arroz y agua.
Hay otra variedad, los denominados fideos de soja. Su aspecto es transparente y muy finitos. Este tipo de fideos ofrecen muchas posibilidades.
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Mientras se cuece la pasta, prepararemos el marisco. En esta ocasión hemos optado por utilizar unos gambones así de hermosos. Los pelamos conservando la cola y reservando las cabezas.
Ya solo quedará añadir los tallarines cocidos y mezclar todo bien. Para que se integren los sabores y se forme una buena salsita podemos añadir un poco de agua de cocción de los tallarines. Esto ayudará a unificar sabores.